Es muy difícil dilucidar si se necesitan más o menos médicos o enfermeros. Si se necesitan más en unos servicios hospitalarios que en otros, en unas zonas geográficas que en otras y en un nivel asistencial que en otro (hospital vs. equipos de atención primaria). Sin embargo, los datos llevan años indicando que las cosas no se están haciendo demasiado bien y la actualización de los mismos nos indica ya que se están haciendo bastante mal.
Evolución del número de médicos y enfermeros en los hospitales públicos y en los equipos de atención primaria
La tabla y figura siguientes muestran la evolución entre 2010 y 2022 de la población y del número de médicos y enfermeros en los equipos de atención primaria (EAP) y en los hospitales del Sistema Nacional de Salud (SNS). Los datos de población proceden del INE (aquí). Los datos del número de profesionales proceden del Sistema de Información de Atención Primaria (SIAP) y del Sistema de Información de Atención Especializada (SIAE) accesibles a través del Portal Estadístico del Ministerio de Sanidad (aquí).
COMENTARIO 1
No es la primera vez que se presentan estos datos en este blog. Lo interesante es que su actualización confirma el empeoramiento de la tendencia observada desde hace algunos años. Los médicos en los hospitales del SNS aumentan 4,5 veces más que los médicos (pediatras y médicos de familia) en los EAP. Los pediatras aumentan en los hospitales un 27%, un punto porcentual más que el conjunto de todos los médicos hospitalarios que lo hacen un 26%. Algo chocante si tenemos en cuenta que la población infantil durante el mismo periodo se ha reducido un 5% como luego veremos. Los médicos de los servicios de urgencias hospitalarias siguen su escalda, ya descrita en anteriores entradas, y su número aumenta un 43% en estos 12 años. Y mucho ojo, porque la población apenas crece un 1%, aunque el número de personas de 65 o más años crece un 21%. Este grupo de edad (≥ 65 años) representaba en 2010 el 16,80 % de la población y el 19,97 % en 2022 (un aumento de más de 3 puntos porcentuales).
Envejecimiento poblacional y necesidad de sanitarios
Confeccionadas a partir de los datos del INE, las siguientes figuras muestran el incremento del número de personas ≥ 65 años y ≥ 80 años desde 2001 a 2023. Claramente se ha producido un incremento importante que sitúa a nuestro país entre los más envejecidos de Europa y, por tanto, del mundo (aquí). El número de personas ≥ 80 años prácticamente se ha duplicado durante este periodo y el de ≥ 65 años ha aumentado un 42%. Las generaciones del baby boom están iniciando su llegada a la jubilación. La presión sobre el sistema de protección social y el sanitario continuará aumentando y empezará a ser muy notable alrededor del año 2035 (aquí); es decir, pasado mañana.
Por lo tanto, necesitamos un sistema sanitario que se adapte al envejecimiento que tenemos y al que se nos viene encima y la distribución de sanitarios entre niveles asistenciales (hospital vs. equipos de atención primaria) no se está preparando, ni de lejos, para este futuro tan inmediato. En pocos años tendremos una sociedad muchísimo más envejecida. Y no sólo eso, tendremos unos viejos mucho más formados que nunca. En no más de 10 años, es muy probable que más del 25% de las personas de ≥ 65 años tenga estudios superiores, cuando hace dos décadas su presencia era meramente testimonial (aquí).
Confeccionadas a partir de los datos del INE (aquí) y del Sistema de Información de Atención Primaria (SIAP) accesible a través del Portal Estadístico del Ministerio de Sanidad (aquí), las siguientes figuras muestran el tamaño promedio del cupo del médico de familia de EAP y su distribución porcentual y en número de pacientes en grupos de edad desde el año 2004 que el SIAP ofrece información sobre el tamaño del cupo. ¿Cómo se lee? Por ejemplo, en el año 2004 el cupo promedio del médico de familia era de 1484 personas con un 53,6% entre 15 y 44 años de edad y un 46,4% restante de ≥ 45 años. Con el paso de los años, este último grupo etario aumenta claramente su peso en detrimento del primero. La figura sobre el número de pacientes en cada grupo de edad muestra que el tamaño del cupo promedio en 2022 se reduce en 128 personas respecto de 2004 pero el grupo de ≥ 45 años aumenta en 101 personas, lo que cuestiona que el cupo promedio de 2022 tenga una menor carga de trabajo que el cupo promedio de 2004 sino más bien mayor.
Evolución del número de niños (< 15 años) y del número de pediatras en los hospitales públicos y privados
La tabla y figura siguientes muestran la evolución entre 2010 y 2022 de la población infantil (< 15 años), del número de pediatras en los hospitales públicos (SNS) y privados, y de la oferta MIR (número de plazas) de Pediatría. Los datos de población proceden del INE (aquí). Los datos de la oferta MIR proceden del blog MIRentrelazados de JM Romeo (aquí). Los datos del número de profesionales proceden del Sistema de Información de Atención Especializada (SIAE) accesible a través del Portal Estadístico del Ministerio de Sanidad (aquí).
COMENTARIO 2
El número de pediatras en los hospitales del SNS aumenta un 27%, 4,5 veces más que el número de pediatras en los equipos de atención primaria (EAP). Más aumenta, un 63%, el número de pediatras en los hospitales privados con lo que, finalmente, el número total de pediatras en los hospitales españoles aumenta un 31% en estos 12 años. Sin embargo, la población infantil no aumenta sino que se reduce un 5%. No deja de ser chocante lo que ocurre y no habla precisamente de una buena distribución de recursos, en este caso pediatras, entre niveles asistenciales. ¿De verdad que es necesario que el número de pediatras en los hospitales públicos crezca un 27% cuando la población infantil decrece un 5%? ¿Están los niños cada vez más enfermos? Si es así, ¿no lo estarían también para los pediatras de los centros de salud?
Evolución del número de matronas y del número de partos en los hospitales públicos y privados
La tabla y figura siguientes muestran la evolución entre 2010 y 2022 del número de matronas y del número de partos (vaginales + cesáreas) en los hospitales del SNS y en los hospitales privados. El porcentaje de cesáreas respecto del total de partos es muy similar durante los 12 años y se sitúa alrededor del 25%. Los datos proceden del Sistema de Información de Atención Especializada (SIAE) accesible a través del Portal Estadístico del Ministerio de Sanidad (aquí).
COMENTARIO 3
Durante estos 12 años, el total de matronas en los hospitales españoles crece un 42%, un 38% en los públicos y un 210% (más del doble) en los privados. Sin embargo, el número de partos (vaginales + cesáreas) se reduce en el conjunto de los hospitales un 30% (un 27% en los públicos y un 39% en los privados). El número de partos es un buen proxy del número de embarazos. Por lo tanto, asumimos que también el número de embarazos en España se habrá reducido en una proporción muy similar. Con esta reducción del número de partos y probablemente también de embarazos, ¿de verdad que hace falta aumentar un 42% la matronas en los hospitales españoles (un 38% en los públicos)? Desde luego, la reducción de embarazos, partos y nacimientos, también contribuye al envejecimiento de la población. Nos encontramos en mínimos de nacimientos de la serie histórica con un número de nacimientos en 2022 de 329.251 (aquí), un 40% inferior del promedio anual de nacimientos durante la Guerra Civil y la posguerra inmediata (1936-1942) (aquí).
COMENTARIO FINAL
La población infantil se reduce un 5% mientras que el número de pediatras en los hospitales públicos aumenta un 27%, 4,5 veces más que en los Equipos de Atención Primaria (EAP) donde aumenta un 6%. El número de partos en los hospitales públicos se reduce un 27% pero el número de matronas en dichos hospitales aumenta un 38%. El total de médicos en los hospitales públicos aumenta un 26%, 4,5 veces más que el total de médicos (médicos de familia y pediatras) en los EAP que lo hace un 6%.
Tenemos ya, más que hace pocos años, una población ≥ 65 años mucho más envejecida, mejor formada y más frágil por su comorbilidad. Estas tres características se intensificarán en los próximos años y tendremos un mayor número de viejos con más necesidad de cuidados que de curaciones y con unos servicios médicos hospitalarios que ofrecen una asistencia cada vez más fragmentada. Un mayor número de viejos con mayor necesidad de médicos y enfermeras de familia cercanos que coordinen toda esa atención sanitaria y prevengan, con especial énfasis, el daño derivado de la propia actividad del sistema sanitario sobre una población cada vez más frágil, comórbida y polimedicada (prevención cuaternaria) (aquí).
Da la impresión de que existen unas inercias en el mundo hospitalario público español responsables de que aumente el número de médicos o de enfermeras en similar medida en las distintas especialidades o servicios sin tener demasiado en cuenta si son estrictamente necesarios o no. Tal es el caso de los pediatras y de las matronas. Por lo tanto, si eso ocurre con pediatras y matronas en el hospital público, ¿por qué no puede estar ocurriendo en otras especialidades médicas o servicios médicos o de enfermería de dichos hospitales? ¿De verdad es tan necesario que el número de médicos de los Servicios de Urgencias de los hospitales públicos haya aumentado tanto? Si son necesarios todos estos incrementos de médicos y enfermeras en el hospital, ¿por qué no lo son en los EAP? ¿Es este el sistema sanitario público que necesita una sociedad que dentro de pocos años puede que sea la más envejecida del mundo?
Es como predicar en el desierto Juan, mientras las elites no confíen en la atención primaria y no confían, no hay nada que hacer a menos que el gasto pegue un petardazo y se den cuenta que lo mas eficiente para todo el sistema es tener buenos médicos de atención primaria. Pueden preguntárselo a los holandeses (Países Bajos) que es considerado como uno de los sistemas más eficientes. Allí nadie deja de pasar por el medico de familia, Y sí, es otro sistema. por de pronto las empresas sanitarias son "sin ánimo de lucro ", vamos, lo que no quieren aquí ver ni en pintura, por lo menos en la CAM,
ResponderEliminarNo es que "no se den cuenta", tenemos lo que quieren que tengamos. Tenemos un sistema dualizado, un doble sistema, uno para ricos e influyentes y otro para el populacho. De momento lo tenemos en la atención ambulatoria, irreversible ya en la atención primaria donde yo lo llamo "descremado sociológico".
EliminarY este "descremado" poco a poco metastatizará en el hospital público:
https://saludineroap.blogspot.com/2022/05/el-descremado-sociologico-de-la.html
Es lo que técnicamente se llama un "Two-tier health system".
En este editorial del BMJ se preguntaban hace dos años si el NHS va camino de eso:
https://www.bmj.com/content/376/bmj.o618
Si lo lees verás que nosotros estamos mucho más cerca que ellos (ya lo somos en la atención ambulatoria y camino de serlo en el hospital) de ser un sistema de dos niveles. Nosotros tenemos un 25% de población con un seguro médico privado (ellos el 7%). Nosotros tenemos un gasto sanitario privado del 30% y ellos el 21,5%.
Aquí nadie se pregunta nada. Los políticos siembran la "faltademédicos" cuando antes sembraban "el mejorsistemasanitariodelmundo". Y a tirar otros cuatro años más.
Deplorable.
Cuando se hace tan rematadamente mal y los datos son tan contradictorios con la realidad cotidiana es porque se quiere eso. Quienes han planificado todo este desaguisado, ¿no estarán esperando a que esa gran población mayor de 65 años caiga masivamente como consecuencia del experimento génico masivo nominado vacuna covid 19? Quizás así vayan concordando las cifras con lo que planifican.
ResponderEliminarCuando año tras año se persevera en el error es que no es un error, es un objetivo, es lo que se quiere. ¿Y qué se quiere? Pues lo que ya tenemos y he comentado más arriba: un sistema dualizado. Los políticos seguirán manteniendo Muface y similares y seguirán incentivando fiscalmente el seguro médico privado con la esperanza de que ese 25% de sujetos de 65 o más años con estudios superiores que tendremos en pocos años se compre o mantenga ese seguro incentivado. La atención ambulatoria, tanto la atención primaria como la ambulatoria especializada, quedarán deterioradas y con sus lista de espera para el populacho que no pueda comprase ese seguro médico incentivado fiscalmente. Y aquí paz y después gloria. Qué más da que el acceso directo en peregrinaje a especialistas varios por un dolor lumbar a través de ese seguro produzca, en más casos que lo que la gente se imagina, más iatrogenia y retraso diagnóstico que tener un médico de familia que coordine y te defienda de la hiperactividad médica inapropiada: sarna con gusto no pica. Viva la sarna.
Eliminargracias por estar ahí Juan, algún día igual dejaremos de clamar en el desierto....pero mientras tanto, hay que mantener esta información contra la infoxicación....
ResponderEliminarYo creo que el aumento de matronas en hospitales puede obedecer a que aumentan los lugares donde trabajan, sustituyendo a enfermeras sin especialidad. Por ej plantas de puerperio, de alto riesgo obstétrico o urgencias de gine y obstetricia. Manuela (Emma)
ResponderEliminarSí, sí,... igualito que se hace con las enfermeras especialistas en enfermería comunitaria vía EIR.
EliminarNo queremos verlo porque duele.