Por su interés y referencias al sector sanitario público y con permiso del autor, reproduzco este artículo publicado en El Notario por Juan Claudio de Ramón (aquí).
Desfeudalizar el Estado autonómico
Se llama Central Remota para las
Operaciones de Socorro Sanitario (CROSS en su sigla) y tiene una tarea
fundamental: cuando una región agota las camas disponibles en sus hospitales,
el sistema se activa buscando soluciones para el traslado de los pacientes a
estructuras hospitalarias de regiones limítrofes. ¿España? Va a ser que no:
Italia. Un país que, al igual que el nuestro, tiene su sanidad descentralizada
por mandato constitucional igual que el nuestro. En lo peor de la pandemia,
durante los 67 días transcurridos desde el 9 de marzo hasta el 20 de mayo,
fueron 116 los italianos pacientes de COVID-19 u otras enfermedades que,
mediante ambulancia, helicóptero o avión, fueron transferidos de su lugar de
residencia a una región que podía darles cuidado. También en Francia, al
saturarse las capacidades sanitarias de París, se medicalizaron trenes de alta
velocidad para trasladar pacientes a regiones menos golpeadas por el
virus.