Hola, me llamo Juan y fui petróleo barato

Tras una entrevista en una tele de ámbito nacional, a Ángela Hernández (aquí) le cae la del pulpo por utilizar una expresión mía: "petróleo barato". Ángela tenía claro de qué hablaba y a qué se refería utilizando esa expresión pero no es el caso de la mayoría los televidentes. Pero claro, en política todo lo que se puede malinterpretar se malinterpreta. Y si te entrevistan como sindicato, te tienen por político. Así funcionan las cosas, sobre todo si eso sirve para zurrar a Ángela una y otra vez durante días. A Ángela, muchos anencéfalos, le han dicho de todo, racista lo más suave. 

La expresión "petróleo barato" me la inspiró la lectura de un artículo de José María Peinado, a la sazón Decano de Medicina de Granada y Secretario de la Conferencia de Decanos de Medicina, publicado en 2006 y titulado "¿Faltan médicos?" (aquí). En una parte del mismo, Peinado soltó la frase inspiradora: "¿Se necesitan más médicos o se quiere simplemente que fluya más petróleo de los pozos, porque el aumento de la oferta abarata su coste?". Por cierto, este artículo de Peinado, conserva perfectamente su vigencia hoy mismo. Un año después, en julio de 2007, ante las reiteradas noticias de la falta de médicos en España, utilicé por primera vez públicamente la expresión en un artículo publicado en prensa regional titulado "Escasez de médicos: se acabó el petróleo barato" (aquí).

Peinado y servidor escribimos nuestros respectivos artículos por las reiteradas noticias que se publicaban por entonces, como se publican ahora, sobre la supuesta "falta de médicos" en España. Tenía España entonces y tiene ahora una tasa de médicos por habitante superior a la media de los países de la OCDE. Entonces se decidió aumentar el númerus clausus igual que se ha decidido ahora también tras una avalancha de noticias en el mismo sentido. Noticias, aquellas y las de ahora, protagonizadas por políticos sanitarios que echan de menos la existencia de esa bolsa de "petróleo barato" creada a finales de los años 70 y primeros 80 del pasado siglo. Estos políticos desearían tener ahora mismo, o en el futuro inmediato, otra similar. 

He utilizado esta expresión en innumerables ocasiones, la última en esta reciente presentación (aquí). Más de 15 años después, la expresión ha acumulado suficiente difusión para que muchos, como Ángela, la conozcan y sepan de su significado. Las metáforas, y esta expresión lo es en el fondo, uno las puede conocer o no. Ángela, persona instruida, la conoce y la conoce desde hace mucho tiempo como otros muchos la conocen.

Yo fui "petróleo barato" y no quiero que más médicos en España sean "petróleo barato", ni los médicos españoles ni los extranjeros, como los estudios de la OMC muestran que está ocurriendo con los médicos extracomunitarios que ejercen en nuestro país (aquí).

Pero lo verdaderamente triste del asunto del pim-pam-pum a Ángela es que algunos que le golpean conocen perfectamente la expresión y su significado pero les da igual, siguen atizando a Ángela en las redes o en la prensa dando a entender que Ángela dijo lo que no dijo, involucrando en la cuestión a todo un mismísimo embajador (aquí). 

La exageración nos invade. La supuesta "falta de médicos" en España no sólo es un "problema de Estado" (aquí). Eso ya es una nimiedad. Su solución precarizante: el evidente intento por parte de nuestros políticos de crear una nueva bolsa de "petróleo barato" de médicos de la nacionalidad que sea, algunos lo convierten en "conflicto diplomático". 

No faltan médicos, como dice Esther Samper, otra persona instruida, en este recomendable artículo titulado "¡Faltan médicos... que acepten nuestras miserables condiciones de trabajo!" (aquí), artículo en donde también utiliza la expresión "petróleo barato".