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domingo, 28 de marzo de 2021

Parámetro alterado que debería poner en conocimiento de su Médico de Atención Primaria: el cubo de la basura

Los médicos de familia de los centros de salud vemos a menudo como se nos generan muchas visitas completamente innecesarias por resultados supuestamente anormales de análisis u otras pruebas indicadas por otros médicos (incluso privados) sin relevancia clínica  ni patológica alguna. Por ejemplo, es muy frecuente que eso ocurra con las pruebas practicadas por las Mutuas Laborales en sus revisiones a los trabajadores. A lo que no terminamos de acostumbrarnos es a que eso ocurra por pruebas indicadas por algún servicio especializado público como me acaba de ocurrir esta semana por el análisis practicado a un paciente de mi cupo, donante de sangre, en su última donación en el Banco de Sangre. El paciente cumple con lo que se le dice y pide una consulta telefónica para poner en mi conocimiento el parámetro alterado. Tras varios intentos de llamada, por fin el paciente me coge el teléfono por la mañana. Sin embargo, no pudo explicarme cuál era el parámetro alterado pues en ese momento no tenía delante el informe del Banco de Sangre. El paciente se desplazó al centro a dejar fotocopia del informe por la tarde. Al día siguiente, la fotocopia estaba en mi casillero. El parámetro alterado estaba señalado a mano por alguien del Banco de Sangre con la anotación, también a mano, de "Esperar 6 meses antes de donar" y una firma que no identificaba a nadie. ¿Cuál era el parámetro alterado? Pasen y vean.




Desconozco qué profesional señala a mano el parámetro alterado: un VCM de 77 cuando el intervalo va de 78 a 105 y el resto del hemograma es rigurosamente normal. ¿Un hematólogo? ¿Un enfermero? ¿Un auxiliar? ¿Un administrativo? Cuesta creer que se trate de un hematólogo. Recordemos que estamos hablando del Banco de Sangre donde ejercen expertos hematólogos que saben, mejor que yo, que ese parámetro supuestamente alterado (un VCM de 77) carece de relevancia alguna. 

Entonces, si no es un médico hematólogo,... ¿qué profesional señala el parámetro alterado? ¿Por qué se le hace creer al paciente que su analítica es anormal y se le preocupa con ese "debería poner en conocimiento"? ¿Por qué ha de consultar el paciente por un VCM de 77 con su médico de atención primaria y no con un hematólogo del Banco de Sangre?  ¿Por qué no "se pone en conocimiento" de un hematológo del Banco de Sangre tal VCM "alterado"? La respuesta está clara y todos nos la imaginamos: el hematólogo no está para perder el tiempo con chorradas como esa. Pero,... ¿es que el tiempo del paciente y el de su médico de familia no valen nada? Ni uno ni otro deberían perder un segundo de su tiempo por esta grandiosa minucia.

Este no es más que un ejemplo de otras muchas situaciones similares. Ahora con la pandemia estas situaciones se multiplican y los pacientes consultan, afortunadamente de forma telefónica, para aclararlas. Como ejemplos, y sin salirnos del ámbito público, todos los días tenemos consultas de este estilo: "es que [me tenía que revisar el oftalmólogo hace 3 meses y no lo ha hecho, hágame un volante urgente,... me hizo una RNM el traumatólogo hace un dos meses y no sé nada del resultado,... me hicieron un análisis en digestivo hace tres meses y nadie me ha dicho nada al respecto, etc.]". 

Con la pandemia, la consulta del médico de familia se ha convertido ya del todo en el cubo de la basura del sistema sanitario. Aquello que nadie quiere hacer termina en la consulta del médico de familia; aquel resultado irrelevante pero no estrictamente normal (fuera de intervalo o con el famoso asterisco) que lo vea o explique el médico de familia; aquellos papeles que no sirven para nada y que nadie quiere cumplimentar, que los rellene el médico de familia. Aquel problema que surge y no está previsto cómo resolver que lo resuelva el pringao chico para todo del médico de familia. Y así llevamos décadas. ¿Por qué he escrito esta entrada si con ella no descubro nada nuevo? Pues por que no me resigno a ser el cubo de la basura. Aunque mejor que yo lo explica Úrsula López, médica de familia y diputada en el Parlamento de Castilla-La Mancha.


 



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6 comentarios:

  1. Que razón tenéis
    Pero no veo fácil la solución
    La política no apuesta por la AP la utiliza de esclavo solo le importa lo que luce el hospital véanse las noticias presión asistencias hospitalaria y UCIs esa es su sanidad
    Triste y decepcionante

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  2. Bueno, siempre se llamó a esta situación "cajón de sastre", también podría ser "cajón desastre", pero la preocupación del paciente está justificada, en todo caso se trata de un problema con los "compañeros". En mi caso utilizo el correo electrónico, indicando al paciente mi dirección, para que el paciente me remita la analítica, evitando un desplazamiento. Otro paso, al que si tengo tiempo recurro, es llamar al "compañero" generador del problema, o directamente al hematólogo del centro de transfusiones para aclarar el problema. En todo caso tenemos que resignarnos a ser el último escalón, al que recurren los pacientes gracias a la confianza y accesibilidad. Y ¡menos mal que nos tienen a nosotros!

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  3. La culpa es del hematólogo:
    a) Porque no ha “pintado” 77 a 78.
    b) Porque no ha enseñado al residente que le valida, con su clave o una clave general, los resultados a “pintar”.
    c) Porque no ha enseñado al técnico que valida los resultados, con su clave o una clave general, a pie de contador a “pintar” esos resultados.
    d) Por no establecer una regla de alarma en el contador que le retenga esos resultados y le permita valorarlos y validarlos correctamente, introduciendo un comentario de experto que no alarme al cliente ni sobrecargue de trabajo a AP.

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  4. El día a día. Cansa decirlo o fastidiar al paciente. Últimamente, dado que puedo mandar correos directamente al hospital, a los que tienen la prueba y la cita dos meses después, les envío un correo al médico diciéndole que se ponga urgentemente en contacto con el paciente que está muy preocupado por los resultados que pueden "ver" en el portal del paciente.

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  5. Juan Antonio García Pastor28 de marzo de 2021, 21:31

    .
    Realizar protocolos que, si no tienen un resultado de una completa normalidad, no sabemos resolver, genera una cadena innecesaria de actos innecesarios que no sabemos detener
    Un tsunami de procedimientos que sobrecarga a otros compañeros
    .

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  6. Comparto con Juan el Servicio Navarro de Salud y sé de este hábito progresivamente creciente en la pandemia....por las Mutuas previamente, por los compañeros de otras especialidades ahora in crescendo...
    Como dicen más arriba, menos mal que nos tienen a nosotros, pero la situación está llegando a un límite y la realidad es que hace falta un cambio/reforma. Lo reclamamos e hicimos, cuando empezó la AP con la MFyC...y hemos ido dejando caer este tipo de cosas por esta siempre del lado del paciente...nosotr@s en segundo lugar.
    Siento no aportar soluciones, creo que tenemos que buscarlas entre tod@s.
    Gracias, Juan.

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